Otra idea para favorecer una habitación infantil en color blanco nos la dan en esta otra imagen donde la pincelada de romanticismo la pone un textil en azul vinilos de estrellas y una guirnalda en tonos oscuros. Complementos todos ellos muy favorecedores y que añaden personalidad al conjunto sin romper con el equilibrio de la base monocroma.
En la parte superior encontramos la otra cama un lugar casi escondido y muy especial. Con una red de protección y una escalera de madera es un espacio muy original. Sin duda se convertirá en el refugio secreto favorito de los peques y nos permite aprovechar el cuarto al máximo.
Además del tono verde apagado en las paredes en este cuarto de Monbebecheri han querido añadir tonos rosados ya que es para una niña. Es un rosa muy suave que podemos ver en las cortinas en algún cuadro y en la ropa de cama. Nos gustan las habitaciones infantiles sencillas como esta en donde los tonos dejan paso a la iluminación y hay espacio suficiente para que jueguen y se diviertan.
Si estabas convencida de que el tono negro no tenía cabida en los cuartos infantiles piénsalo un poco más después de ver todas las propuestas de dormitorios para niños en blanco y negro que te traemos. Algunos como este de Pinterest son muy atrevidos con mucho color negro pero con elementos que le dan el toque infantil como las cabezas de peluche o el cabecero de la cama en forma de casa.
Abrimos el post con un precioso cuartito muy natural encabezado por una amplia alfombra en color blanco a juego con la cama y el resto de mobiliario. Como contrapunto basta añadir algunas plantas cestas de mimbre o un par de textiles a color.
Si te gustan los tonos más oscuros entonces puedes decantarte por un azul marino. El inconveniente de estos colores es que restan mucha luz y por eso hay que contrarrestarlos con un suelo blanco o bien pintar solamente la mitad de la pared tal y como hacen en este cuarto de Liveloudgirl.
De vez en cuando nos encontramos con habitaciones infantiles que vale la pena desgranar poco a poco fijándose en cada pequeño detalle. En este cuarto de Room to Bloom no queremos destacar ni el estilo ni sus mobiliario sino algo que parece secundario pero no lo es porque muchas veces marca la diferencia.
Las estrellas y los conejos están por todo el cuarto acompañando a la pequeña Heidi. Estrellas en forma de cojín de guirnalda o de vinilos en las paredes y figuritas de conejos que vigilan su cuarto. Los toques vintage también forman parte de este bonito espacio infantil con textiles con flores estampadas y esas bonitas maletas que sirven para guardar esos secretos mágicos.
En la cama vemos unos textiles sencillos con las mismas pinceladas de gris que hay por el cuarto. La estantería nos rechifla con muchos espacios asimétricos para poner sus cosas favoritas. Encontramos estrellas conejos una vajilla y una varita mágica.
En este cuarto han pensado a lo grande y han añadido un papel pintado con un elefante haciendo malabarismos como en un circo. Sin duda las paredes se llevan todo el protagonismo y nos dan esa idea de ambiente divertido. ¿Qué os han parecido estas tres temáticas para el cuarto infantil?
Esa casa de muñecas es pura magia una pieza para jugar durante horas pero que decora el espacio como ninguna. En madera también encontramos el nombre de la pequeña con un pequeño toque personalizado justo al lado del cuadro de una mamá cisne.
En Morewithlessdesign encontramos una habitación tan sencilla que nos sorprende pero en la cual los peques parecen estar pasándoselo en grande. Unos paneles de madera crean un mueble empotrado en la pared en el cual suponemos que hay no solo almacenaje sino también una zona de juegos para ellos.
En Design-milk encontramos un cuarto de bebé que se inspira en la montaña pero desde un punto de vista nórdico. La madera está presente y crea montañas en el armario y esa silla tiene un toque rústico con esos tonos y la manta de pelo. Es un estilo sutil pero que nos recuerda a la montaña. Otro detalle que no falta es la cabeza de peluche de ciervo en la pared.
Las tendencias en decoración siempre nos traen cosas nuevas en las que fijarnos para descubrir una nueva obsesión. En cuestión de decoraciones veraniegas no podemos negar la evidencia de que nos hemos enamorado de piñas y flamencos pero que también hay espacio para los geniales cactus.